¿Qué zona debe reforzar la “U” de cara a los próximos campeonatos?

Este lunes estamos preguntando a través de @Cienx100Azules por las diferentes áreas del plantel, que a juicio de nuestros auditores/lectores debieran ser reforzadas en esta etapa de contrataciones (sin límite reglamentario de cupos en esta oportunidad por cierto). Acá, algunos aspectos a tomar en cuenta:

El tema de los Arqueros ha quedado explícitamente afuera de las alternativas, habida consideración que con Herrera y De Paul, más Espinoza, o Collao, es el sector donde menos complicaciones parecen surgir.

La Zona Defensiva sin embargo, debiera requerir una mano. Específicamente en lo que se relaciona con los centrales. Gonzalo Jara ya ha dado muestras de recuperación de su nivel y hoy, condicionado a la mantención de una actitud menos agresiva/confrontacional con rivales y árbitros, se puede considerar un fijo en esa posición. El problema que aparece es acerca de quién lo acompaña en tales funciones. Christian Vilches, si bien terminó el torneo con mejorías en su juego, sigue siendo un riesgo en caso que reincida en los errores que muchas veces condicionaron resultados negativos. Por otra parte, cuando no está uno de ellos 2, Alejandro Contreras no ha sido todavía capaz de darnos la idea que con él existe un reemplazante seguro. Para este sector del equipo por lo tanto, parece necesario reforzar con alguien que transmita seguridad por sus capacidades y, sobre todo, por su jerarquía.

Respecto a los defensas laterales, Matías Rodríguez y Jean Beausejour dan márgenes mayores de tranquilidad y parecen tener en Franz Schultz y L. Fabián Monzón las opciones de reemplazo suficientes como para estar conformes y medianamente tranquilos (valga la incógnita acerca si a Monzón se le volverá a su función natural como lateral izquierdo o se seguirá experimentando con él en otras posiciones más adelantadas).

Acerca del Mediocampo por su parte, todo dependerá con seguridad de aquellos respecto de los que se logre confirmar su continuidad. Un escenario probable es que tanto Lorenzo Reyes como Gonzalo Espinoza continúen en el equipo, y otro muy diferente es que uno de ellos o ambos no lo hagan.
Si esto último sucede, el trabajo de la gerencia deportiva tendrá tareas de suyo más arduas. Porque si es Lorenzo Reyes quien no sigue, habrá que salir tras el encuentro de quien sea capaz de sustituir no sólo al hombre y al nombre, sino la capacidad y jerarquía demostrada por el ‘21’ azul durante el último torneo. Un volante central de esas características y condiciones no será tan fácil de conseguir en nuestro medio. Si en cambio es Gonzalo Espinoza quien no continúa, es en cierta forma algo más sencillo de reemplazar la función de uno como él. El retorno de Rodrigo Echeverría desde su préstamo en Everton, no teniendo características idénticas a Espinoza, podría ayudar a soslayar su probable partida. El regreso de Guzmán Pereira, aun cuando podría ser una muy buena solución, no parece ser una opción a ser utilizada por ahora.
Y acá ocurre algo parecido a lo que sucede con los defensas centrales. En el hipotético feliz caso que ambos permanezcan, se echa de menos a 1 ó 2 alternativas seguras en el banco para responder a la necesidad de no contar en cierto momento con alguno de ellos por lesión/suspensión. También se extraña a alguien que reemplace a Gustavo Lorenzetti sobre todo cuando muestra evidencias de prematuro cansancio en los partidos (no parece tener ya “fuelle” para más de 15 minutos en el primer tiempo o para más de 10 minutos en el segundo). En este caso, la necesaria existencia de un volante con características puramente ofensivas, de alto recorrido, con presencia cerca del área rival, de habilitaciones precisas y tiro de media distancia, se extraña y mucho.
Sobre la Ofensiva, la realidad es que esta área del campo es la más crítica tal vez. La “U” jugó muchos partidos apoyada en las condiciones y técnica de Felipe Mora exclusivamente. Muy poco o nada se puede atribuir a los buenos resultados de la última etapa a sus acompañantes en esa línea. Ni Sebastián Ubilla, ni Lucas Ontivero, ni Leandro Benegas, fueron quienes condujeron a la “U” a los triunfos, ni están en situación de darnos la necesaria tranquilidad como para cifrar esperanzas en ellos, sobre todo si Felipe Mora emigra como es lo más probable que ocurra. El muy probable re-enganche tras recuperarse de su lesión de Jonathan Zacaría, ofrecerá una opción más pero seguirá siendo muy poco para enfrentar los dos torneos del segundo semestre.
A confiar y esperar entonces que los ejecutivos a cargo, esta vez sí atinen y encuentren la fórmula para balancear un plantel que muchas veces demostró que, cuando el DT giraba sobre sus talones y miraba al banco, no encontraba respuestas sólidas al momento de hacer las necesarias sustituciones. Su responsabilidad?, ninguna, pues este plantel ‘lo armó’, para decirlo de alguna manera, otro entrenador hace ya un año o un poco más. Lo esperable también es que el jolgorio y la euforia por el título hayan quedado en el interior de los salones del hotel en que se realizó la fiesta de celebración y no sirva para confundirse y creer que con lo que hay basta y sobra. Eso, sería un tremendo error.
El “juego” por lo tanto ya está iniciado. Vuestras opiniones pueden ayudarnos a saber de verdad lo que analiza, lo que observa y lo que quiere el hincha. Para nosotros, muchas veces la sabiduría misma en estas situaciones está en lo que ustedes marquen como sus preferencias.
#VamosAzules

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